El tuning de "seríe"

Hoy en día las marcas de automóviles no se centran exclusivamente en realizar restyling a los coches, y sacar un modelo nuevo.

 

En los últimos años, todas las marcas van añadiendo toques estéticos para agradar al cliente, y que pueda ir configurando el pedido como si de un videojuego de carreras se tratase.

 

El decidir el color de la tapicería o el modelo de llanta, parece que es algo que se ha quedado antiguo. Ahora además se puede decidir entre una gran variedad de vinilos, el color de las llantas, si quieres embellecedores exteriores cromados, dependiendo del color exterior unos reflejos u otros, barnices con tintes o “normales” y así tendríamos una gran variedad no apta para indecisos.

 

Pero y en la post-venta ¿Estamos realmente preparados y formados para todo lo que se nos viene encima? ¿Cómo va a influir esto en nuestra producción? ¿Y en la calidad ofrecida?

 

No todo el mundo esta formado para poner una pegatina que abarca medio techo o compañeros que llevan 40 años de oficio, quiza no esten preparados para aplicar un tinte de un día para otro (lo mismo me equivoco y esto ya lo hacían ellos cuando empezaron en el oficio) Pero ahora todo va muy rápido, y es necesaria la formación constante, de todos los componentes del equipo.
 

Puesto que con una buena formación, evitaremos derrochar material o incluso estropear algún vinilo nuevo. Con la pérdida económica que esto supondría.

 

El tema de la productividad será como todo en un oficio artesanal como el nuestro, el primer vinilo tardarás 3h. y cuando lleves 15 lo harás en 1h. Por eso si tenemos unas nociones básicas, por lo menos no estaremos completamente perdidos la primera vez.

 

Cada marca y modelo propone un tipo de vinilo, unos para adherir con agua otros en seco, lacas tintadas, fondos para los tricapas, perlas como ultimas capas de estos fondos.

 

Nuestro oficio es algo que nos da la oportunidad de estar en un constante proceso de aprendizaje y debemos estar siempre preparados para el cambio, lo que utilizábamos cuando empezamos de aprendices ya no vale. Pero lo que sí tenemos que utilizar son los conocimientos adquiridos e ir aplicándolos y adaptándolos a los nuevos tiempos.

Mi consejo es que todo esto lo tomemos como una oportunidad de aprender y de desarrollar nuestra destreza personal. Y no como si el fabricante nos quisiera amargar la vida.